Aprovecha los consejos de aparcamiento del personal, son muy útiles en un lugar tan concurrido.

bueno, el café parecía tranquilamente bonito hasta que encendieron el reggaeton, un horror musical. ah, y no pude dormir debido al ruido de la fiesta en la terraza, realmente encantador. y ni hablar de que no hubo ningún tipo de gesto compensatorio por todas las molestias sufridas, increíble. casi pensé en dejar buena reseña, pero claro, no pude.

La decoración del hotel es encantadora, con obras de arte originales que adornan los pasillos, dándole un toque de museo. Además, el ambiente del bar es acogedor, lleno de locales disfrutando de su tiempo.

El ruido del bar puede ser molesto por la noche.

Genial y acogedor

Estuvimos un par de noches y la experiencia fue buenísima. El trato del personal era súper amable y siempre dispuestos a ayudar. El desayuno en la terraza era muy rico, ideal para comenzar el día. La única queja sería que el aparcamiento es una locura, así que hay que tenerlo en cuenta. Pero la ubicación es perfecta, todo a un paso.

Esto te ahorrará tiempo y dinero

El personal es maravilloso, sin duda un 10, pero me decepcionó la habitación. Se anunciaba con vistas, pero solo tenía una pared enfrente. Además, el mobiliario necesita renovación urgente. Si no te importa eso, la amabilidad del staff hace que la experiencia sea menos dolorosa.

La habitación era bastante amplia y limpia, con una terraza que daba a los tejados de Collioure, lo que le daba un toque encantador a la tarde.

El aparcamiento a menudo se vuelve un caos cuando el lugar está lleno, y es algo que podría mejorar si se ofreciera una opción privada, aunque se tenga que pagar. La decoración de los pasillos es bonita, pero las habitaciones necesitan renovación, especialmente el mobiliario que se ve anticuado. En una de mis visitas al café, el ambiente cambió drásticamente al sonar reggaetón, algo que no encajaba con el ambiente tranquilo que esperábamos.

La estancia fue maravillosa, con una habitación encantadora que tenía un balcón con vistas al mar y al castillo. La ubicación en el centro de Collioure facilitó mucho visitar lugares como la Iglesia de Nuestra Señora de los Ángeles y la Playa de Port d'Avall, que estaban a poca distancia a pie. A pesar de que el ruido de la fiesta en la terraza fue un poco molesto en la noche, la buena señal de wifi y el confort de la habitación compensaron. El desayuno en la terraza exterior era delicioso, aunque fue un poco básico y no había bufet.

La decoración es única y llena de arte, creando un ambiente acogedor. El desayuno en la terraza exterior es delicioso, especialmente los croissants. La ubicación permite disfrutar de todo lo que Collioure tiene para ofrecer.

Las opciones de aparcamiento son limitadas y puede resultar complicado encontrar espacio, especialmente en temporada alta.

La ubicación es ideal para pasear por el centro y disfrutar de la gastronomía local con maridito. El check-in fue rápido y el personal proporcionó consejos útiles sobre el aparcamiento, lo que facilitó nuestra llegada con los niños.

Mi mujer dice que sería genial tener más opciones de aparcamiento para familias. Encontrar un lugar para dejar el coche fue complicado.

Ubicación central y buen consejo de aparcamiento.

Ubicación en el centro es excelente y la decoración del hotel es encantadora, llena de arte. Sin embargo, el aparcamiento es un verdadero caos, y las habitaciones necesitan una renovación urgente en el mobiliario. Aunque el personal es muy atento, el ruido de la fiesta en la terraza puede llegar a ser muy molesto durante la noche.

Ubicación encantadora, cerca de todo. ¡adiós al coche! Las habitaciones son acogedoras y tienen un aire pintoresco de arte francés. Los baños son amplios, así que puedes moverte con gracia, como si estuvieras en una obra de arte.

El aparcamiento es un espectáculo circense, ¡llévate las palomitas!

La ubicación es excelente, con un encantador balcón francés que da a un río cercano al hermoso puerto. Aunque la habitación era pequeña, tenía aire acondicionado y un servicio de WiFi satisfactorio. El ambiente del bar era animado y acogedor, lleno de clientes locales disfrutando de su tiempo. El arte original en los pasillos añade un toque especial al hotel. Definitivamente una experiencia encantadora en el corazón de Collioure.

El desayuno fue muy básico y podría decepcionarte.

Todo bien, cumple su propósito. Desayuno continental en terraza con vista al mar.